“Es como que se apague la luz, porque golpea a tu cerebro con todo de una vez”, dijo el doctor Michael G. Chez a “CBS Sacramento”, aludiendo a la escena en particular donde las luces y los distintos colores encandilan a los espectadores. “El problema con las salas de cine es que son tan oscuras, que la luz centelleante se parece más a una luz estroboscópica”, añadió.
Uno de los primeros casos de ataques se reportaron en California, donde una función fue detenida con el ingreso de paramédicos para atender a Brandon Gephart. El individuo se enfermó precisamente durante la controvertida escena.
“Estaba con convulsiones, resoplando, intentando respirar”, dijo la novia de Gephart, Kelly Bauman, a “CBS Sacramento”. “Me dio un gran susto”, agregó.
El caso no ha sido una excepción, ya que en Salt Lake City también otra persona, que prefirió guardar su anonimato, sufrió un ataque de similares características mientras veía la película.
“No recuerdo lo que sucedió después. Creo que me desmayé. Según mi esposa, estaba tiritando y murmurando distintos ruidos”, afirmó el afectado.
Fuente: tuzonarosa.co
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