La estrella ha decidido desconectar del trabajo y ha emprendido un viaje a bordo de un lujoso barco por la Riviera Francesa con amigos y con su exnovio Drake, al que ha dado una segunda oportunidad. Se dice que Rihanna, ha sido vista con un look muy deportivo, con gorra roja y con una cerveza en la mano. La celebrity se ha gastado 100.000 dólares en este viaje y piensa llenar el barco de botellas de champagne.
Según el diario ingles The Sun que ''Rihanna está decidida a vivir la vida al máximo después de la muerte de su abuela y decidió darle otra oportunidad a Drake. En el pasado había dicho que no iba a cometer errores y que iba a trabajar todo el tiempo. Pero ella está dispuesta a intentarlo de nuevo. Estarán reunidos en un yate lujoso en Cannes la próxima semana y luego pasarán una semana de crucero en todo el Mediterráneo''.
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